Un hombre con guadaña se ha ido de vacaciones al culo del mundo. Los mayores del lugar no se pueden imaginar qué hace allí, otros temen que se pueda quedar allí por mucho tiempo, otros están demasiado sobrios aún como para hablar de Dios y de su vanidad. La verdad es que solo ha ido a descansar, a desconectar del mundanal ruido y a broncearse. Bueno, todo el bronceado que un saco de huesos y una cara desfigurada puede coger.
Todo aquél que halla recorrido de cabo a rabo el mundo de las maravillas sabe que tiene límites, que esos límites son el culo del mundo, y que cualquiera que se acerque puede caer por el borde...Él no tiene mucho miedo, pues ya ha pasado por todos los mundos a los que se puede llegar desde el borde y no le merecen demasiado respeto. Son mundos como el mundo de las especias, donde se trafica con plantas que vuelven locos a los hombres, el mundo de los árboles, donde ellos son la única viva que habita allí (si, porque los árboles, hablan y se comunican entre ellos).... Al único que teme es al desconocido y oscuro fin del mundo...nadie sabe qué hay allí, nadie lo quiere saber.
Un alma inmortal también necesita evadirse de vez en cuando, son demasiados años de ajetreado trabajo y demasiados disgustos a la espalda. Muchos amagos de infarto, muchas reanimaciones de última hora, muchas vidas salvadas en el último momento...y es que con un simple chasquido de dedos puede quitar la vida a un puñado de luciérnagas, pero no es lo mismo.
A dos mil kilómetros de allí un hombre trata sin éxito de suicidarse, no muy lejos una panda de matones dejan exhaustos de apalear a un deudor al ver su ilógico aguante a los golpes...
Y es que un hombre con guadaña se ha ido de vacaciones al culo del mundo.
No ha pedido permiso a nadie, porque el primo hermano del destino tampoco necesita de jefes que le controlen, ni de vacaciones pagadas, ni mucho menos de seguridad social.
Dicen que no es algo permanente, pues un trabajo como el suyo no se puede demorar, hay demasiados agonizantes, ¡Como para hacerles esperar! además él siempre ha sido muy suyo, no quiere dejar a nadie en su lugar cuando no puede estar, solo cuando son vidas vacías las que hay que recoger.
Un hombre con guadaña se ha ido de vacaciones al culo del mundo....
Eternamente tuyo, Philosophia.
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